El helipuerto de Grupo Oroño, base de una nueva capacidad logística para el trasplante de órganos
En nuestra región se están realizando cada vez más trasplantes de órganos, apoyados en nuevas infraestructuras aeronáuticas. Dos casos recientes demuestran las notables ventajas de un sistema que acorta distancias y tiempos vitales.
Cada órgano donado para trasplante posee un tiempo limitado desde que se retira desde el donante hasta que se implante en el receptor (tiempos de isquemia fría), tras el cual el órgano ya no es útil. El operativo de procuración es el proceso de obtención de órganos y tejidos para trasplante en cuyo desarrollo llegan a intervenir hasta 150 profesionales especializados, con el objetivo de dar respuesta a las personas en lista de espera.
Cuando se detecta que existe un órgano en condiciones de ser donado, se activa el proceso logístico para la realización de la ablación (proceso de extracción de los órganos). Generalmente el equipo medico que realizará la ablación es llevado desde el centro donde se realizará la operación de implante del órgano hasta un aeropuerto, para ser trasladados por avión o helicóptero hasta la ciudad donde se encuentra el donante. La ablación de los órganos se practica en el quirófano del establecimiento asistencial donde se encuentra el fallecido. Luego, los órganos son trasladados por el mismo equipo medico hasta el centro donde se realizará el trasplante.
Recientemente en nuestra ciudad se han realizado 3 operativos de trasplantes exitosos que contaron la intervención de un helicóptero, para el traslado de los equipos médicos y los órganos. En uno de ellos se transportó en helicóptero al equipo medico de ablación desde el helipuerto del Grupo Oroño en el Sanatorio Parque, hasta la Ciudad de Paraná. Allí se realizó la ablación y una vez finalizada, el equipo médico junto con el órgano fueron traslados de regreso al helipuerto del Grupo Oroño (HGO), donde esperaba el resto del equipo quirúrgico para realizar la operación de trasplante.
Todo el proceso, que realizado por tierra hubiese demorado aproximadamente 9 horas (6 de viaje y tres de ablación), utilizando el helicóptero solo demoró 4 hs y 25 min. (1 hora 25 minutos de viaje y 3 de ablación).
En otro operativo, se combinó el uso de un avión jet con un helicóptero, ya que el donante se encontraba en San Luis. El equipo médico se trasladó en avión hasta esta localidad para realizar la ablación. Al regresar con el órgano donado al Aeropuerto de Rosario, lo esperaba el helicóptero para realizar el traslado hasta el helipuerto de Grupo Oroño en solo 3 minutos.
Optimizar la preservación de los órganos para trasplante y reducir los tiempos de traslado es clave para evitar la pérdida de injertos, pacientes y recursos. Las nuevas infraestructuras aeronáuticas sanitarias ponen a la región en un lugar de vanguardia para la realización de este tipo de intervenciones.